Queridos hermanos y hermanas, tomémonos un momento para reflexionar sobre el poder de nuestras palabras. La Biblia nos enseña que nuestro discurso puede tener un profundo impacto tanto en nosotros mismos como en quienes nos rodean. Las malas palabras, el lenguaje duro y el chisme pueden ser como dagas afiladas, perforando los corazones de aquellos a quienes hablamos e incluso hiriendo nuestras propias almas. El Señor nos llama a ser conscientes de nuestro lenguaje, instándonos a usar palabras que eleven y animen en lugar de derribar y destruir.
En nuestra vida diaria, es fácil caer en la trampa de usar un lenguaje descuidado, especialmente cuando estamos enojados o frustrados. Pero como seguidores de Cristo, se nos recuerda que debemos controlar nuestras lenguas y elegir nuestras palabras sabiamente. Así como una pequeña chispa puede incendiar un gran bosque, una sola palabra pronunciada apresuradamente puede causar un gran daño. Nuestras palabras deben reflejar el amor y la gracia que Dios nos ha mostrado.
Consideremos la sabiduría que se encuentra en las enseñanzas de Jesús y los apóstoles. Nos recuerdan que lo que sale de nuestra boca es un reflejo de lo que hay en nuestros corazones. Si nuestros corazones están llenos de amor y bondad, nuestras palabras reflejarán esas virtudes. Pero si albergamos amargura o ira, se manifestará en nuestro discurso.
Querido amigo, esforcémonos por hablar palabras llenas de gracia y verdad. Animémonos unos a otros, edificándonos con bondad y sabiduría. Al hacerlo, no solo honramos a Dios, sino que también creamos una comunidad de amor y respeto. Recuerden, nuestras palabras tienen el poder de bendecir o maldecir, de sanar o dañar. Elijamos nuestras palabras con cuidado y que sean un testimonio del amor de Cristo dentro de nosotros.
Si encuentras útil esta reflexión, te animo a compartirla con otros, difundiendo el mensaje de bondad y amor a través de nuestras palabras.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre las ‘malas palabras’.
“Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes”
— Efesios 4:29
“Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca”
— Colosenses 3:8
“De una misma boca proceden bendición maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así”
— Santiago 3:10
“La blanda respuesta quita la iraMas la palabra áspera hace subir el furor”
— Proverbios 15:1
“La muerte la vida están en poder de la lenguaY el que la ama comerá de sus frutos”
— Proverbios 18:21
“Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio”
— Mateo 12:36
“Si alguno se cree religioso entre vosotros, no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana”
— Santiago 1:26
“Guarda tu lengua del malY tus labios de hablar engaño”
— Salmos 34:13
“El que guarda su boca su lenguaSu alma guarda de angustias”
— Proverbios 21:23
“PorqueEl que quiere amar la vidaY ver días buenosRefrene su lengua de malY sus labios no hablen engaño”
— 1 Pedro 3:10
“No lo que entra en la boca contamina al hombre; mas lo que sale de la boca, esto contamina al hombre”
— Mateo 15:11
“Pon guarda a mi boca, oh JehováGuarda la puerta de mis labios”
— Salmos 141:3
“Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres”
— Tito 3:2
“Las palabras de la boca del sabio son llenas de gracia, mas los labios del necio causan su propia ruina”
— Eclesiastés 10:12
“Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espadaMas la lengua de los sabios es medicina”
— Proverbios 12:18
“En las muchas palabras no falta pecadoMas el que refrena sus labios es prudente”
— Proverbios 10:19
“El que guarda su boca guarda su almaMas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad”
— Proverbios 13:3
“Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno”
— Colosenses 4:6
“Panal de miel son los dichos suavesSuavidad al alma medicina para los huesos”
— Proverbios 16:24
“Ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias”
— Efesios 5:4
“La lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, contamina todo el cuerpo, inflama la rueda de la creación, ella misma es inflamada por el infierno”
— Santiago 3:6
“Manzana de oro con figuras de plataEs la palabra dicha como conviene”
— Proverbios 25:11
“No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”
— 1 Corintios 15:33
“Mas evita profanas vanas palabrerías, porque conducirán más más a la impiedad”
— 2 Timoteo 2:16
“El que ahorra sus palabras tiene sabiduríaDe espíritu prudente es el hombre entendido”
— Proverbios 17:27
“No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel, que fue ignorancia. ¿Por qué harás que Dios se enoje a causa de tu voz, que destruya la obra de tus manos?”
— Eclesiastés 5:6
“Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo”
— Santiago 3:2
“¿Has visto hombre ligero en sus palabras?Más esperanza hay del necio que de él”
— Proverbios 29:20
“Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; cualquiera que diga: Necio, a su hermano, será culpable ante el concilio; cualquiera que le diga: Fatuo, quedará expuesto al infierno de fuego”
— Mateo 5:22
“La lengua apacible es árbol de vidaMas la perversidad de ella es quebrantamiento de espíritu”
— Proverbios 15:4
“El hipócrita con la boca daña a su prójimoMas los justos son librados con la sabiduría”
— Proverbios 11:9
“Desechando, pues, toda malicia, todo engaño, hipocresía, envidias, todas las detracciones”
— 1 Pedro 2:1
“El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca”
— Lucas 6:45
“Sean gratos los dichos de mi boca la meditación de mi corazón delante de tiOh Jehová, roca mía, redentor mío”
— Salmos 19:14
“Sin leña se apaga el fuegoY donde no hay chismoso, cesa la contienda”
— Proverbios 26:20
“Su boca está llena de maldición de amargura”
— Romanos 3:14
“Está envanecido, nada sabe, delira acerca de cuestiones contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas”
— 1 Timoteo 6:4
“En toda labor hay frutoMas las vanas palabras de los labios empobrecen”
— Proverbios 14:23
“Bendecid a los que os persiguen; bendecid, no maldigáis”
— Romanos 12:14
“Llena está su boca de maldición, de engaños fraudeDebajo de su lengua hay vejación maldad”
— Salmos 10:7
“El corazón del justo piensa para responderMas la boca de los impíos derrama malas cosas”
— Proverbios 15:28
“Pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal”
— Santiago 3:8
“La boca del necio es quebrantamiento para sísus labios son lazos para su alma”
— Proverbios 18:7
“Abre su boca con sabiduríaY la ley de clemencia está en su lengua”
— Proverbios 31:26
“Jehová el Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar palabras al cansado; despertará mañana tras mañana, despertará mi oído para que oiga como los sabios”
— Isaías 50:4
“Hablará mi lengua tus dichosPorque todos tus mandamientos son justicia”
— Salmos 119:172
“Mejor es el pobre que camina en integridadQue el de perversos labios fatuo”
— Proverbios 19:1
“No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano”
— Éxodo 20:7
“La lengua de los sabios adornará la sabiduríaMas la boca de los necios hablará sandeces”
— Proverbios 15:2
“Mis labios no hablarán iniquidadNi mi lengua pronunciará engaño”
— Job 27:4