Queridos hermanos y hermanas, hoy profundizamos en el maravilloso tema de los milagros tal como se ven en la Biblia. Los milagros son eventos extraordinarios que muestran el poder y la gloria de Dios. A menudo desafían las explicaciones naturales y sirven como testimonio de Su autoridad divina y amor por Su pueblo. A lo largo de la Biblia, vemos muchos casos donde Dios realiza milagros para liberar, sanar y guiar a Su pueblo. Estos eventos milagrosos no son solo historias del pasado, sino también un testimonio de lo que Dios puede hacer en nuestras vidas hoy.
Uno de los milagros más famosos en la Biblia es la apertura del Mar Rojo. Cuando los israelitas estaban atrapados entre el ejército del faraón y el mar, Dios instruyó a Moisés que extendiera su mano sobre el agua. El mar se abrió, creando un camino seco para que los israelitas escaparan. Este milagro demostró el poder de Dios para salvar a Su pueblo contra todas las probabilidades. Nos recuerda que no importa cuán graves parezcan nuestras circunstancias, Dios es capaz de abrir un camino cuando parece no haber ninguno.
Otro milagro notable es cuando Jesús alimentó a cinco mil personas con solo cinco panes y dos peces. Este acto de compasión mostró no solo el poder divino de Jesús, sino también Su profundo cuidado por las necesidades físicas y espirituales de las personas. Nos enseña que Dios nos provee abundantemente, incluso cuando nuestros recursos parecen limitados.
Además, los milagros de sanación realizados por Jesús, como devolver la vista a los ciegos y resucitar a Lázaro de entre los muertos, revelan Su autoridad sobre la enfermedad y la muerte. Estos milagros nos aseguran que Dios es el sanador supremo y que Su poder no está limitado por las limitaciones humanas.
Queridos amigos, estos milagros bíblicos son mucho más que relatos históricos; son una fuente de esperanza y fe para nosotros hoy. Nos recuerdan que Dios está activamente obrando en nuestras vidas y que nada es imposible para Él. Si encuentras ánimo e inspiración en estas historias, te prometo que experimentarás un renovado sentido de fe y confianza en el poder de Dios.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras bíblicas a continuación que hablan sobre los milagros.
“Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, manifestó su gloria; sus discípulos creyeron en él”
— Juan 2:11
“Mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible”
— Mateo 19:26
“Él les dijo: Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios”
— Lucas 18:27
“Extendió Moisés su mano sobre el mar, hizo Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; volvió el mar en seco, las aguas quedaron divididas”
— Éxodo 14:21
“Entonces Jesús, mirándolos, dijo: Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios”
— Marcos 10:27
“Hacía Dios milagros extraordinarios por mano de Pablo”
— Hechos 19:11
“Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar”
— Mateo 14:25
“Habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera”
— Juan 11:43
“Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, se pasará; nada os será imposible”
— Mateo 17:20
“Cuando habían remado como veinticinco o treinta estadios, vieron a Jesús que andaba sobre el mar se acercaba a la barca; tuvieron miedo”
— Juan 6:19
“Una mujer, de las mujeres de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo, diciendo: Tu siervo mi marido ha muerto; tú sabes que tu siervo era temeroso de Jehová; ha venido el acreedor para tomarse dos hijos míos por siervos”
— 2 Reyes 4:1
“Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate anda”
— Hechos 3:6
“Entonces tomó los cinco panes los dos peces, levantando los ojos al cielo, bendijo, partió los panes, dio a sus discípulos para que los pusiesen delante; repartió los dos peces entre todos”
— Marcos 6:41
“Respondiendo Simón, le dijo: Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, nada hemos pescado; mas en tu palabra echaré la red”
— Lucas 5:5
“Dicho esto, escupió en tierra, hizo lodo con la saliva, untó con el lodo los ojos del ciego”
— Juan 9:6
“Jesús extendió la mano le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. al instante su lepra desapareció”
— Mateo 8:3
“Entonces, sacando a todos, Pedro se puso de rodillas oró; volviéndose al cuerpo, dijo: Tabita, levántate. ella abrió los ojos, al ver a Pedro, se incorporó”
— Hechos 9:40
“Mas él, tomándola de la mano, clamó diciendo: Muchacha, levántate”
— Lucas 8:54
“Jehová oyó la voz de Elías, el alma del niño volvió a él, revivió”
— 1 Reyes 17:22
“Se le acercó mucha gente que traía consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos, otros muchos enfermos; los pusieron a los pies de Jesús, los sanó”
— Mateo 15:30
“Jesús le dijo: Ve, tu hijo vive. el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, se fue”
— Juan 4:50
“Pero Jesús, volviéndose mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. la mujer fue salva desde aquella hora”
— Mateo 9:22
“El varón de Dios preguntó: ¿Dónde cayó? él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, lo echó allí; hizo flotar el hierro”
— 2 Reyes 6:6
“Vinieron, pues, Moisés Aarón a Faraón, hicieron como Jehová lo había mandado. echó Aarón su vara delante de Faraón de sus siervos, se hizo culebra”
— Éxodo 7:10
“Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño, porque ante él fui hallado inocente; aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho nada malo”
— Daniel 6:22
“El sol se detuvo la luna se paróHasta que la gente se hubo vengado de sus enemigos¿No está escrito esto en el libro de Jaser? el sol se paró en medio del cielo, no se apresuró a ponerse casi un día entero”
— Josué 10:13
“Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos al mar; se hizo grande bonanza”
— Mateo 8:26
“Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, anda”
— Juan 5:8
“Así venció David al filisteo con honda piedra; hirió al filisteo lo mató, sin tener David espada en su mano”
— 1 Samuel 17:50
“Pero él, sacudiendo la víbora en el fuego, ningún daño padeció”
— Hechos 28:5
“Al momento fueron abiertos sus oídos, se desató la ligadura de su lengua, hablaba bien”
— Marcos 7:35
“Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; tomando los cinco panes los dos peces, levantando los ojos al cielo, bendijo, partió dio los panes a los discípulos, los discípulos a la multitud”
— Mateo 14:19
“Porque nada hay imposible para Dios”
— Lucas 1:37
“Tomó Jesús aquellos panes, habiendo dado gracias, los repartió entre los discípulos, los discípulos entre los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían”
— Juan 6:11